Luego de 12 años de gobierno, el cambio de una constitución que tenía 39 años, un intento fallido de derrocamiento cívico-militar, una oposición desleal, la confrontación con PDVSA (la empresa más importante de Venezuela), la confrontación abierta con los Estados Unidos y sus aliados, medios de comunicación unidos en una línea mediática y 14 procesos electorales, de los cuales resaltan un referéndum revocatorio y la reelección presidencial, no tiene parangón en la historia del mundo. Recientemente se dio a conocer por parte de la encuestadora GIS XXI que el presidente Chávez goza de un 61% de aprobación como mandatario, reportando un incremento con respecto al mes anterior (+3%). A pesar de las fallas en materia de gestión de servicios públicos de este año, y de la radicalización de las políticas dirigidas a garantizar la soberanía alimentaria, y controlar el sistema financiero nacional, la mayoría de la población aprueba la gestión en niveles históricos.

Desconocer esta realidad, sería un esfuerzo perdido, pues las dimensiones de la popularidad de Chávez traspasan las fronteras del pensamiento democrático occidental, inquietando a diversos observadores -cualificados o no- pues no hallan razones para entender esta realidad. Sólo a través de la comprensión de lo que significa para una sociedad fatigada de una democracia que no satisfacía los intereses de los cuidadanos, y lo que ha implicado las políticas de inclusion, participación y reconocimiento de las mayorías, pudiese comprenderse los amplios niveles de popularidad que tiene el presidente Chávez.

Esta popularidad en lo electoral es "transferible", claro con sus exepciones. Para el fin del tercer trimestre del año viene un proceso electoral, donde nuevamente la campaña se ha orientado desde el PSUV como una votacion a favor del Presidente, al menos en gran parte. Las estimaciones para las elecciones parlamentarias del 26 de septiembre, algunas indican que seguirá el PSUV obteniendo la mayoría parlamentaria, cercano a los dos tercios de los curules a elegirse, e incluso algunas otras le otorgan números superiores a los dos tercios, pero ninguna de estas cotempla que obtendrá minoría parlamentaria. Según el estudio citado, para el mes de junio el PSUV podría obtener el 44% de los votos frente a un 20% de la oposicion y 29% aún no tiene claro por quien va a votar.

Este escenario preliminar a tres meses de las elecciones, marca una tendencia claramente desfavorable para la oposición, quien en una suerte de acumulación de errores -muchos de ellos a mi parecer innecesarios, y producto de los enanos intereses de sus líderes-, pueden accionar de manera torpe y desesperada, violentando nuevamente el sistema democrático. Sin embargo, soy de los que apuestan por una sana convivencia democrática en donde gobierno y oposición puedan coexistir en una suerte de equilibrio y contraparte, necesario y conveniente para un buen funcionamiento de los sistemas democráticos.

EN RÁFAGA

Le cantaron strike a la Ley de Arizona
Por la posición absurda de la gobernadora de Arizona Janice Brewer es posible que la realización del juego de las estrellas del beisbol no se realice en este estado como protesta a esta ley absurda y llena de contradicciones. Muros abstractos que se levantan en contra del continente!

Por el hueco se va el tiempo!
Es necesario y perentorio que el Ministerio de Transporte y Comunicaciones de respuesta al problema del Km 0 de la carretera Panamericana, por donde se escapa el tiempo de los que habitamos en los Altos Mirandinos. Prueba de fuego para el investigador Francisco Garcés.

¿Y el candidato?
Me sorprende que a escasos meses de la elección del alcalde en el municipio Carrizal, sólo se conozca a un solo candidato. Los tiempos para darle lidia al Monarca de Carrizal no me cuadran, pues no es fácil desenquistar de los electores carrizaleños la idea de que el único alcalde que puede gobernar el municipio es el actual, quien es el único alcalde que ha gobernado durante tanto tiempo un municipio en Venezuela. Pero me cunde la pregunta de si realmente el PSUV ya escogió su candidato...?